jueves, 8 de abril de 2010

Don Nelson, el entrenador victorioso

No es que yo sea un experto en baloncesto, ni mucho menos, pero siempre me ha gustado este deporte, sobre todo gracias a Allen Iverson. Otro de los personajes por los que siempre he simpatizado ha sido por el entrenador Don Nelson, básicamente porque su aspecto bonachón me resultaba simpático. Pues bien, resulta que Donald Arvin Nelson se convirtió en la noche de ayer en el entrenador que más victorias ha logrado en la historia de la NBA con 1333 en un total de 2394 partidos, es decir, un record de 1333/1061 lo que hace un 55% de victorias. Esto tiene mucho más mérito si tenemos en cuenta que en los 31 años que lleva en los banquillos nunca ha entrenado a un equipo de los denominados grandes.
Comenzó su carrera como interino en los Bucks de Milwaukee, en los que permaneció 10 temporadas (1976-1987), logrando en 7 de ellas superar la barrera de las 50 victorias (no olvidemos que la temporada regular consta de 82 partidos, playoffs aparte) y alzándose con el título de división en alguna de ellas y siendo nombrado en 2 temporadas (1983 y 1985) el mejor entrenador de la temporada. Posteriormente fichó por los Warriors de Golden State, donde permaneció desde 1988 hasta 1995. En los Warriors implantó un sistema ofensivo que ha seguido practicando a lo largo de su carrera. Con los Californianos volvió a ser nombrado mejor entrenador del año por tercera vez en su carrera.
En 1995 firmó por los Knicks de Nueva York, pero sólo estuvo unos meses pues, tras tener problemas con algunas de las vacas sagradas del vestuario, abandonó el equipo cuando tenían un record de 34-25. A la temporada siguiente cogió a un equipo perdedor como eran los Mavericks de Dallas y con trabajo lo convirtió en un equipo sólido, capaz de superar la barrera de las 50 victorias cuatro veces consecutivas y convirtiendo al alemán Dirk Nowitzki en una estrella. Pero aún así los Mavs no lograron jugar una final, por lo que delegó en su ayudante y antes base, Avery Johnson.
En el 2006 volvió a Golden State y en esa misma temporada metió al equipo en los PlayOff, donde se enfrentaron al equipo con mejor record de la temporada, los Dallas Mavericks precisamente, y ante todos los pronósticos consiguieron doblegarlos y eliminarlos en primera ronda, cuando todo el mundo los daba como finalistas de la NBA (Cuatro dio el sexto partido, donde los Warriors pusieron el 4-2 y creo que ha sido, junto a la final olímpica de Pekín, el partido de baloncesto que más me hizo vibrar).
Su único pero es que le falta un anillo como entrenador, que no como jugador. Empezó jugando en Chicago, donde estuvo dos años. Posteriormente fue traspasado a los Lakers, pero éstos lo cortaron al finalizar la temporada. Entonces firmó por los Celtics, donde permaneció 11 temporadas (de 1965 a 1976), convirtiéndose en uno de los mejores sextos hombres de la historia de la liga. Con los de Massachusetts logró la friolera de 5 anillos y su dorsal, el 19, cuelga hoy del techo del TD Banknorth Garden de Boston.
Ojalá que algún día pueda lograr el ansiado anillo como técnico (y si es en los Sixers, mejor :P).

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