Vuelta por todo lo alto

El Balonmano Atlético de Madrid se estrenaba en su nueva casa ante la que fue su bestia negra el año pasado, el FC Barcelona Intersport; la Supercopa de España era el invitado especial.
El club había hecho un llamamiento a la afición para que llenara Vistalegre y ésta no defraudó. Desde el primer segundo los colchoneros se dejaron la garganta para conseguir que los de Talant Dujshebaev sintiesen que no jugaban siete, sino setecientos.
El partido comenzó con unos excelentes Sterbik y Saric (mejor jugador de la Asobal el curso pasado) que mantuvieron a raya a los atacantes de ambos conjuntos. Por parte de los rojiblancos el más destacado era Julen Aguinagalde, que se pegaba con la defensa blaugrana y fue el que consiguió romper el muro que Saric había puesto bajo su arco.
Cuando el Barça pudo marcharse por mediación de dos siete metros prácticamente consecutivos, apareció Sterbik para demostrar que los serbios también pueden ser héroes. Al descanso nos fuimos con un 13-10 y en parte fue gracias a él.
La segunda parte comenzó con un Atleti al que le salía todo y que se empezó a marchar en el marcador, logrando en pocos minutos una diferencia abismal. Fue entonces cuando se produjo el momento más emotivo del partido: la salida al parquet de Joseja Hombrados, atlético reconocido, que se llevó una grandisima ovación nada más entrar. Al madrileño le costó entrar un poco en juego, pero dejó un par de paradas para goce de su afición.
Al final, con un 33 a 26 campando en el marcador, los valientes que acudieron a Vistalegre se fueron con ganas de volver y con una clara idea en la cabeza: el partido duró hasta que le aguantó el fuelle a Danjel Saric...