Sopor en el Calderón

Al paso que lleva el equipo, en vez de repartir las revistillas informativas que suelen regalar en el Vicente Calderón a los aficionados que acuden al estadio, nos van a regalar gorros para dormir... ¡Vaya aburrimiento de partido! Si no llega a ser por el Kun Agüero los de Quique se habrían metido en un gran charco, pero el astro argentino, cual Capitán Pescanova, llegó al rescate de su técnico.
Del partido poco puedo decir pues lo único reseñable, además del ansiado pitido final, fue la actuación del 10. En el minuto 3' provocó un penalti que Diego Forlán se encargó de fallar (¡por favor, que los tire Simão!) y que debió suponer la expulsión de Aranzubia, que se quedó en amarilla. En el 7' se fabricó él solito un golazo, eso sí, partiendo en posición antirreglamentaria. Empezó a driblar rivales y al plantarse en el área hizo lo que quiso con el meta riojano; acción similar repetiría en el 34' tras recibir un buen pase de Raúl García.
Disfrutemos de lo poco que nos queda por ver al Kun con la rojiblanca, pues tras renovar le han bajado la cláusula a 45 millones para que cuando venga un Chelsea de la vida los golfos, perdón quería decir los dirigentes, tengan la excusa de decir que no pudieron hacer nada por retenerle, pues vinieron con la cláusula...
Respecto al Depor un único apunte: su primer tiro a puerta ( y digo puerta porque casi lo manda fuera del estadio) fue en el minuto 89'... pinta mal el equipo de Lotina.
Y para terminar, mención especial para Marcel Domingo, ex portero y ex entrenador del Atlético de Madrid, que murió ayer en su Francia natal. Mi padre (colchonero de esos que lo ven todo negro) al darme la noticia me dijo que ha sido el mejor entrenador que ha tenido el club en toda su historia, además de dar ciertos datos como:
· Cuando este señor vino a entrenar al Atleti, el primer dia se sorprendió que si perdían los jugadores entraban como si nada al vestuario, y les dijo que un jugador que perdía tenía que estar jodido por no haber ganado, que no podiía entrar como si nada hubiera pasado, que tenían que invocrarse más y saber que no era cualquier cosa perder con esa camiseta... igualito que ahora.
· En una entrevista le preguntaron por el día más triste a lo largo de su extensa carrera deportiva y Marcel respondío sin dudar, "el día que me dijeron que no continuaba en el Atlético de Madrid".
Descanse en paz.