lunes, 30 de mayo de 2011

Llegan Caminero y Aguilera. Pantic, nuevo míster del filial

El Atlético de Madrid ha decidido contar con dos viejas glorias para que lleven la parcela deportiva del club, ocupando los cargos que realizaban Suso García Pitarch y José María Amorrortu.
José Luis Pérez Caminero (primer futbolista al que un servidor idolatró) ya tiene experiencia como secretario técnico, pues ejerció este cargo en el Valladolid. Lo malo es que Caminero también tiene experiencia... en temas presidiarios. El vallisoletano estuvo en la cárcel por blanquear dinero... ¿Le habrá contratado el dúo prescrito por este motivo? Al menos podemos estar contentos, pues es seguro que no viajará a Brasil un mes como hacía su predecesor... pues tiene el pasaporte retirado. Su primera labor será encontrar el técnico idóneo que sepa lidiar con el chaparrón que se aproxima...


Por su parte, Juan Carlos Aguilera será el encargado de dirigir el fútbol base. Correcaminos Aguilera es una de esas personas que profesan el amor a los colores rojiblancos por los cuatro costados. Tuvo la mala suerte de formar parte de la plantilla del Tenerife en la temporada 95/96, cuando el Atlético de Madrid consiguió el mítico Doblete. Aún así, el de San Cristóbal de los Ángeles aportó su granito de arena cuando en la penúltima jornada se enfrentaron en el Heliodoro Rodríguez López ambos equipos; llegando el partido a su fin y con empate a uno en el marcador, Aguilera tuvo la oportunidad de dejar los tres puntos en las Islas, pero misteriosamente mandó fuera la pelota a pesar de tener toda la portería vacía...


Milinko Pantic acometerá su primera experiencia en los banquillos dirigiendo al Atlético de Madrid B. No hace falta que diga que Pantic es uno de los máximos culpables de que el Atleti obtuviese el Doblete, pero lo que sí me gustaría compartir es que cuando Antic propuso su fichaje, Jesús Gil no estaba muy por la labor de ficharle, pues no le atraía la idea de pagar por un futbolista de un equipo desconocido de la liga griega. El técnico serbio, convencido de la calidad de su compatriota, llegó a decir que si hacía falta abonaría los setenta y cinco millones que costaban su traspaso de su propio bolsillo, lo que terminó de convencer a Gil. El resultado, ya lo conocemos todos... El banquillo del Calderón le espera.
Mucha suerte a los tres en su nueva andadura en la casa que tanto amaron...

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